Estreñimiento

marzo 19, 2015

ESTREÑIMIENTO EN NIÑOS

Autor: Dra. Danely Valdovinos 

Se define como la alteración en la frecuencia de la defecación, tamaño o consistencia de las heces con relación al patrón normal intestinal de cada niñ@.

En la mayoría de los casos se puede encontrar historia de una experiencia de defecación dolorosa, a veces, acompañada de fisura anal, o que el estrés y los cambios funcionales en la vida diaria pueden alterar la frecuencia de evacuaciones teniendo también disminución de la sensibilidad rectal en donde las heces sufren una reabsorción de líquidos tomando una consistencia más dura y reforzando la experiencia dolorosa que favorece mayor retención (es decir; un círculo vicioso).

El estreñimiento muchas veces se confunde con Disquezia que se refiere a la presencia de pujo y llanto por 10 minutos previos a una evacuación suave en un niño menor de 6 meses de edad previamente sano y cuyas causas y tratamiento son diferentes.

Podemos darnos una idea de cuánto debe evacuar un niño según su edad aunque NO TODOS los niños siguen las reglas

  • De 0 a 3 meses: Dos a 3 veces por día.
  • De 6 a 12 meses: Entre 1 y 2 veces por día.
  • A partir del año: Mínimo 1 por día.

 

El patrón evacuatorio normal se establece a partir de los 4 años.

Muchos padres confunden el estreñimiento con el hecho de que su bebé no evacua todos los días, es totalmente normal que un bebé no evacue diario, sobre todo si su alimentación es exclusiva al pecho y principalmente entre los 3 y 5 meses. El parámetro para decir que un niño está estreñido es la presencia de evacuaciones DURAS, si las evacuaciones son blandas, aún si el niño evacua sólo vez por semana, se considera totalmente normal, más aún si el bebé está sin síntomas y crece adecuadamente.

HECES DURAS EN ESTREÑIMIENTO

 

El tratamiento dependerá de los síntomas y la edad del niñ@ y deberá estar indicado por su médico de cabecera. Pueden ir desde los más naturales como miel de maíz o el uso del supositorio de glicerina, así como los laxantes vía oral y enemas evacuantes. Los laxantes prácticamente no se absorben o se absorben en mínimas cantidades y las dosis dependerán, en cada niño, de la severidad del caso o la susceptibilidad del paciente a cada medicamento por lo que deberá individualizarse. Lo importante es tratar el estreñimiento a la brevedad ya que puede volverse un problema crónico y severo que puede tener complicaciones a corto y largo plazo. Una de las complicaciones más frecuentes son las infecciones recurrentes de las vías urinarias y la incontinencia fecal retentiva (evacuaciones involuntarias después de haber adquirido el control de esfínteres).

En algunos casos y dependiendo de lo que se encuentre en la historia clínica deberán solicitarse estudios de laboratorio y radiografías.