El sueño es una actividad necesaria para que tus pequeños y pequeñas tengan un desarrollo completo, una buena salud y una infancia feliz, ya que no solo es un momento donde descansan, sino que su cerebro procesa todo lo que paso durante el día, sus niveles de energía se recuperan, sus emociones se mantienen en equilibrio y mucho más.
El tiempo del sueño varia entre las edad de tu bebé, por ejemplo: un bebé de 9 meses necesita entre 12 o 16 horas de sueño (incluyendo siestas), mientras que un pequeño de 4 años necesita entre 10 o 13 horas (incluyendo siestas); con esto en mente te traemos unos cuantos consejos para ayudarte a crearle buenos hábitos de sueño a tus pequeños para que tengan horas de sueño tranquilas e ininterrumpidas:
- Predicar con el ejemplo: tus hijos e hijas imitan muchos comportamientos que ven en casa, por eso es necesario que pongas el ejemplo en muchas cosas, los hábitos de sueño incluidos. Intenta no desvelarte, trabajar hasta altas horas de la noche o ver la televisión o utilizar algún aparato electrónico antes de irte a la cama, ya que esto ayudará a tus bebés a identificar que hacer y que no hacer antes de dormir.
- Mantener una rutina diaria: la misma hora para despertarse, para las comidas, para la siesta y para jugar le ayudará a tu pequeño a sentirse seguro y confortable y le ayudará a que la hora de dormir sea fácil.
- Hagan actividades durante el día: Los niños pequeños tienen mucha energía (a veces puede parecer que es ilimitada), por esto es bueno realizar actividades físicas como jugar, hacer deporte, meditar y más para que a la hora del sueño, tus bebés no estén todavía llenos de energía.
- Supervise el tiempo al que están expuestos a aparatos electrónicos: está comprobado que los aparatos electrónicos (celular, tablet, videojuegos, computadora, etc) causan muchos problemas de sueño, debido a la intensidad de la luz y a la reactivación del cerebro, por esto es recomendable no dejar que tus pequeños utilicen aparatos electrónicos antes de irse a la cama.
- Aprende a identificar problemas del sueño: los más comunes en los niños son: dificultad para conciliar el sueño, despertarse durante la noche, roncar, resistirse para ir a dormir, el síndrome de apnea del sueño y la respiración ruidosa, por lo que es necesario ver si alguno de tus pequeños sufren algo similar para poder tratarlo.
