¿Qué es el índice de masa coporal?
El IMC es su peso en kilos divido por la altura (estatura) al cuadrado.
IMC = Peso (kg) / altura (m)2
Ejemplo:
Altura: 165 cm (1,65 m).
Peso: 68 kg
Cálculo: 68 ÷ 1,652 (2,7225) = 24,98
El IMC de un niño es una herramienta de evaluación valiosa. Pero es solamente una pieza del rompecabezas para averiguar si un niño tiene un peso saludable. En primer lugar, es importante saber que el IMC no es una medición perfecta. Por ejemplo, los niños de menor estatura con una complexión musculosa pueden tener un IMC alto, pero poca grasa corporal. También los deportistas pueden tener un IMC más alto, debido a que tienen más masa muscular.
No obstante, en general, los percentiles del IMC por encima del 95 % son un signo confiable de que un niño tiene un exceso de grasa corporal y está en riesgo de sufrir complicaciones de salud.
Lo que puede llegar a causar un IMC alto, puede llegar hasta la obesidad es una enfermedad crónica que puede poner a los niños en riesgo de sufrir problemas de salud tanto a corto plazo como en el futuro. Puede aumentar el riesgo de padecer otras enfermedades crónicas, como por ejemplo diabetes, hipertensión, dolor articular crónico y apnea del sueño. También aumenta el riesgo de padecer estrés emocional, como acoso (bullying) y baja autoestima.
También sabemos que es más probable que los niños con obesidad sean obesos más adelante, en su vida de adultos. Sin embargo, ¡nunca es demasiado tarde para hacer cambios saludables y positivos para su familia!
Todas las familias deben aspirar a incorporar una dieta balanceada y nutritiva y ejercicio diario en la rutina de un niño. Algunos niños con obesidad necesitan más que esto. Su pediatra puede ofrecerle orientación y vincularlo con recursos que le ayuden a alcanzar estas metas. Si su hijo estuviera fuera del rango de percentiles 5 y 85 del IMC, hable con el pediatra sobre las mejores opciones de tratamiento adaptadas a sus necesidades individuales.
Fuente: healthychildre.org